Tres maestros y un instante detenido
«Comenzó el programa con el Prelude a solo de la Suite en Re mayor de Louis Couperin ejecutada por la tiorba de Daniel Zapico, quien luego conquistara el espacio más arrebatador del programa.»
«Zapico interpretó una hiperconcentrada y adornadísima Chaconne de De Visée y resplandeció con la insistente melodía de Les Bergeries de François Couperin. Unos seis minutos de prístina y silente belleza que demostraron el por qué de su imparable fama.»
El Correo de Sevilla, Sevilla.
Ismael G. Cabral | Julio de 2011.